Lo primero que debemos tener en cuenta es que hay diferentes tipos de viviendas asistidas. La premisa de estos centros es, justamente, asistir a las personas que tienen requerimientos especiales de cuidado en su vida diaria. En realidad, no existe un consenso de lo que son las viviendas asistidas, aunque sí unas características que es importante considerar a la hora de elegir una para sí mismo o para un ser querido. A lo largo de este artículo hablaremos sobre cada una de ellas. También nos centraremos especialmente en las viviendas asistidas para adultos mayores, pues este es el campo de experticia de Ambrosía Vivienda Asistida.
¿De dónde viene el modelo de las viviendas asistidas?
El concepto de las viviendas asistidas viene de Europa. Esta denominación particular surge en Alemania durante la segunda mitad del siglo XX, con influencias del modelo Sueco de Viviendas con Servicios. Como ya hemos dicho no existe un consenso particular sobre lo que este modelo significa, lo importante es otorgarles bienestar en todos los niveles a los residentes y un ambiente óptimo para vivir.
Si deseas saber más sobre el origen europeo de las viviendas asistidas, puedes consultar el libro que editó y recopiló Pilar Rodríguez (2018): “Vivienda para personas mayores en Europa. Nuevas tendencias para el siglo XXI”, en donde hace un compendio de distintos autores expertos en viviendas para adultos mayores con un enfoque dirigido a la arquitectura y la planeación ciudadana, con la intención de integrar las viviendas para adultos mayores a las urbes.
Diferentes enfoques de las viviendas asistidas
Existen viviendas asistidas para adultos mayores y para personas con condiciones de salud mental o física, que por sus circunstancias no pueden vivir solas y necesitan supervisión o cuidados asistenciales. También hay viviendas especializadas, por ejemplo, para personas con demencia o alzhéimer, o enfermedades psiquiátricas específicas. Si tenemos en cuenta lo anterior, las variantes en las viviendas asistidas pueden ser muy amplias. Lo importante es encontrar una adecuada para nuestras necesidades o las de nuestro ser querido.
Generalidades sobre las viviendas asistidas
En términos amplios las viviendas asistidas promueven la autosuficiencia y la independencia de sus residentes, pues esto es importante para su bienestar como individuos. Por supuesto, esa capacidad de autocuidado no es la misma en todas las personas que habitan una vivienda asistida, por lo que existen distintos planes y modalidades adecuados para cada circunstancia como asistencia compartida o personalizada durante 24h, entre otros.
Un punto importante es que las viviendas asistidas no son centros de salud, razón por la que no se brindan servicios de carácter médico más allá de las visitas mensuales. En realidad, las viviendas asistidas buscan ser mucho más que centros de reclusión o mero cuidado para sus residentes, como podrían serlo algunas clínicas psiquiátricas u hogares geriátricos. Lo que buscan es generar comunidades en donde los residentes y sus seres queridos sientan que pertenecen y que pueden tener una vida plena. La vivienda asistida termina siendo el hogar de las personas que allí habitan, esto significa que deben tener la libertad de apropiarse del lugar y del estilo de vida que les proporciona, sin restricciones innecesarias que cuarten su bienestar.
Viviendas asistidas en Colombia
En Colombia las viviendas asistidas son de carácter privado y se conciben como residencias exclusivas para adultos mayores. Algunas se encuentran dentro de las principales ciudades y otras a las afueras de estas. Muchas veces los servicios que se ofrecen son proporcionados por un equipo profesional y especializado en el cuidado de las personas mayores como auxiliares de enfermería, médicos, terapeutas y chefs, entre otros. En realidad, el concepto de la vivienda asistida se aleja muchísimo de los típicos hogares geriátricos o ancianatos que hay en el país.
¿Qué debería tener una vivienda asistida ideal para personas adultas mayores?
1. Ambientes hogareños
Es importante que la edificación en general produzca la sensación de calor de hogar, desde la fachada y los jardines hasta las habitaciones. Las zonas comunes deben ser acogedoras y estar distribuidas de forma tal que permitan a los residentes interactuar entre sí y con sus seres queridos, mientras son supervisados por los cuidadores. También debe haber colores y texturas interesantes que le den calidez al diseño y a los espacios. La idea es alejarse lo más posible del ambiente hospitalario, después de todo es una vivienda, no una institución.
Lo ideal es que las habitaciones tengan los muebles y las pertenencias de toda la vida de los residentes para que se sientan cómodos y en casa. Cada residente deber libre de personalizar su espacio de acuerdo con sus necesidades y preferencias personales.
2. Pocas habitaciones
El hecho de que haya pocas habitaciones y, por lo tanto, pocos residentes facilita la personalización que ofrece cada vivienda asistida. No es lo mismo tener una ocupación de 10 a 20 personas que tener una de 25 o 35. Claramente la personalización y el entorno familiar varían dependiendo del número de residentes que haya.
3. Mantener las rutinas y el estilo de vida
Esto es fundamental en el modelo de las viviendas asistidas y es una de las cosas que marca una clara diferencia con los hogares geriátricos tradicionales, los ancianatos y las instituciones psiquiátricas. Si bien muchas veces este tipo de instituciones son estrictas con los horarios y las rutinas por practicidad, lo más importante es poder vivir una vejez llena de bienestar que respete el estilo de vida cada persona.
De la misma manera, los horarios de visitas y la posibilidad de compartir los espacios de la vivienda asistida con los seres queridos son factores que le permiten a los residentes vivir con alegría y sin distanciarse de sus amistades o familiares.
4. Concepción de la vejez y las personas mayores
La forma en la que, como sociedad, pensamos en las personas mayores influye muchísimo en los cuidados y los tipos de viviendas que les proporcionamos. Lamentablemente hay quienes consideran la vejez como una etapa de la vida en la que las personas pierden su valor como individuos, por lo tanto, terminan aislándolas o dándoles cuidados inadecuados. Sin embargo, la interacción social, el sentido de pertenencia y un buen entendimiento de la vejez por parte de los cuidadores son factores fundamentales para la calidad de vida en esta etapa.
Hay muchos países en los que las casas de retiro para adultos mayores quedan principalmente a las afueras de las grandes ciudades, de forma tal, que no tienen un contacto directo con las urbes, esto puede tener beneficios como prados verdes, pero también grandes desventajas, por ejemplo, lo difícil que es para las familias y los seres queridos visitar a los residentes.
Además, las clínicas y los centros de salud más especializados usualmente se encuentran en las ciudades. Un traslado desde el campo hasta la ciudad puede ser la diferencia entre un tratamiento oportuno o uno deficiente.
Muchas veces se piensa en la vejez como un momento de la vida en la que la actividad del individuo se reduce considerablemente, por lo que este debería estar tranquilo y alejado de la ciudad; sin embargo, las ciudades les permiten a los adultos mayores mantenerse en contacto con sus seres queridos y hacer actividades por sí mismos como dar paseos o ir al centro comercial, lo cual les facilita sostener su estilo de vida.
Características generales de las viviendas asistidas
El siguiente es un compendio de los rasgos más importantes de las viviendas asistidas que hemos tratado a lo largo de este artículo:
- Existen viviendas asistidas para adultos mayores y para personas con condiciones de salud mental o física que necesitan cuidados especiales.
- Su principio es asistir o supervisar a las personas que tienen requerimientos especiales de cuidado en su vida diaria.
- Existen distintos planes y modalidades adecuados para cada persona.
- No son centros de salud.
- Los servicios que se ofrecen son proporcionados por un equipo profesional y especializado.
- Promueven la autosuficiencia y la independencia de sus residentes.
- No hay horarios ni rutinas estrictos, tampoco para las visitas.
- El equipo se adapta al estilo de vida de la persona y no al revés.
- Los residentes pueden adecuar su habitación a sus gustos y necesidades.
Espero que este artículo te haya ayudado a entender qué son las viviendas asistidas. Si desppués de leer este artículo estás convencido de que una vivienda asistida para adultos mayores es lo que necesitas, visita la página web de Ambrosía.